Amigo de una Tribu de Maldek,

Guía de la ciudad del César.

Tú eres un comunicador que habla a trávez de los árboles

danzantes.

Amigo de la parsimonia celeste, la abigarrada constelación

del pensamiento, cree que miento. Amigo viento,

ayuda a AA que pide auxilio de afecto.

Cobra interés el refugio de mi amor junto a mis árboles,

tejido en palabras más hechos. Nadie sabe tu tonada

fresca, que refresca cálidos viajes de insomnio, vengo a

ti tocando el cielo y las estrellas.

Nadie conoce tu sabiduría, nadie piensa sin engaño, solo

la mano que duele y amo, sin tiempo.

Nadie podrá hablarte por siglos, al escuchar tus pasos

murmurando salvación, apareciendo y desapareciendo,

como el viento, como el viejo amigo sin tiempo...